La Plataforma Huerva Vivo y Coagret consideran, por mucho que la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE) asegure que la finalidad de la obra es mejorar la cobertura del regadío y su ampliación en la zona, que el objetivo “fundamental” es abastecer de agua a los pueblos de la Mancomunidad de Las Torcas, algunos de los cuales prevén desarrollos de hasta un millar de viviendas unifamiliares –caso de Valmadrid– o de 350 con un campo de Golf y también un museo –caso de Fuendetodos–.
Las afecciones que detraerá el recrecimiento son:
1- Alteraciones sobre los elementos geológicos y geomorfológicos en la zona de cerrada, produciéndose también un cierto incremento en el impacto paisajístico.
2- Las alteraciones sobre el ecosistema fluvial, en cuanto a las formaciones de vegetación de ribera que lo flanquean, constituyen un efecto de intensidad. Dadas las características del proyecto, su ejecución significará la desaparición de pequeños tramos de dicho ecosistema, coincidiendo con el espacio de ocupación de la presa y las nuevas colas del embalse.
3- Se va a re-modificar el régimen natural del río mediante el “recrecimiento de la Cerrada”, que conllevará el aumento del efecto del embalse en cola.
4- Los efectos sobre los hábitats y biotopos de encina-carrasca y pinar se consideran elevados.
5- Las alteraciones fundamentales de los ciclos y flujos ecológicos, son de dos tipos, las producidas durante la obra, que se traducen en molestias temporales derivadas de los procesos constructivos y circulación de maquinaria y transportes y, por otra parte, la intensificación del efecto barrera de entre las dos márgenes del embalse. Este hecho producirá alteraciones sobre los movimientos de fauna piscícola.
6- Las afecciones a la fauna, en especial al águila perdicera, especie protegida en el entorno que se verá muy afectada.
La zona donde se enclava el proyecto es una zona LIC y ZEPA, áreas de especial protección del entorno natural y de las aves.
1- Alteraciones sobre los elementos geológicos y geomorfológicos en la zona de cerrada, produciéndose también un cierto incremento en el impacto paisajístico.
2- Las alteraciones sobre el ecosistema fluvial, en cuanto a las formaciones de vegetación de ribera que lo flanquean, constituyen un efecto de intensidad. Dadas las características del proyecto, su ejecución significará la desaparición de pequeños tramos de dicho ecosistema, coincidiendo con el espacio de ocupación de la presa y las nuevas colas del embalse.
3- Se va a re-modificar el régimen natural del río mediante el “recrecimiento de la Cerrada”, que conllevará el aumento del efecto del embalse en cola.
4- Los efectos sobre los hábitats y biotopos de encina-carrasca y pinar se consideran elevados.
5- Las alteraciones fundamentales de los ciclos y flujos ecológicos, son de dos tipos, las producidas durante la obra, que se traducen en molestias temporales derivadas de los procesos constructivos y circulación de maquinaria y transportes y, por otra parte, la intensificación del efecto barrera de entre las dos márgenes del embalse. Este hecho producirá alteraciones sobre los movimientos de fauna piscícola.
6- Las afecciones a la fauna, en especial al águila perdicera, especie protegida en el entorno que se verá muy afectada.
La zona donde se enclava el proyecto es una zona LIC y ZEPA, áreas de especial protección del entorno natural y de las aves.
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