Pescadores asturianos exigen acabar con nutrias, garzas y cormoranes

El Principado de Asturias, antiguo modelo de ecoturismo, donde la naturaleza era su principal bandera económica, está empezando a sufrir un grave proceso de ceguera ambiental. Sin estudios serios ni valoraciones sosegadas, sus responsables políticos parecen empeñados en solucionar los problemas de gestión a la vieja usanza, a tiro limpio.

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CORMORANES Y RÍOS EN ASTURIAS

(...) La Administración tiene entre manos un serio problema, un problema que viene de lejos, desde el momento en el que cedió las competencias en materia de repoblaciones piscícolas a las asociaciones de pescadores, asociaciones que son subvencionadas anualmente con millones de euros de dinero público para que hagan el trabajo que ella misma tendría que hacer. Estas asociaciones son las encargadas de desovar salmones y truchas, de criar los alevines y de soltarlos luego en los ríos que les convenga, a poder ser en presencia de colegiales o políticos en precampaña, para mayor gloria y difusión social de sus actuaciones. Todo esto ha hecho que se consideren propietarios del río y de lo que el río contiene, que hablen de los salmones como de «sus salmones» y que, como si de pastores se tratara, pretendan cuidarlos, criarlos, protegerlos y defenderlos de los depredadores.

El biólogo David Álvarez expone en este Artículo publicado en el diario asturiano La Nueva España la opinión de los grupos ecologistas sobre la política del Gobierno Regional.
Plataforma para la Defensa de la Cordillera Cantábrica